domingo, 26 de julio de 2009

Soledad

Silenciado por el eco de tu certera ausencia
me arrincono en el frío lugar de esta oscura realidad
sonriente al saber de mi designio original
reconozco este constante trasegar...

Con la musa silenciosa
que dice mucho, que dice poco
me dedico a reflexionar, a buscar las razones
que impidieron otros sueños realizar.

Hoy comprendo con mesura y estoicismo
la musa que me debe acompañar
eres tú, oh soledad bella princesa
de cuencas vacías, de voz gélida y frugal
pero suave y aletargadora...

Me resigno a la danza impasible junto a ti
en tus brazos intocables me adormezco suavemente
hoy comprendo sin dolor que te debo de adorar
no por rabia ni dolor

sino por hambre y sed de aprendizaje.....

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