lunes, 8 de mayo de 2006

NO DEBÍ HABER ESCUCHADO TU VOZ

No debí haber sabido de ti…
No debí escuchar tu voz
Pues casi enfermo al saberte cerca de mí…

No debiste llegar por la tarde, con tu típica sonrisa
Tus ojos negros, cargados de vida
Tus manos trigueñas, llenas de ternura
Tus labios rosados, brillantes y hermosos…

No debiste volver, ya te hubieras marchado…

No te quedes ahí, vete, no me hagas daño
Pues laceras el alma, hieres al corazón
Matas de angustia a este soñador…

No debí haber escuchado tu voz
Ni sentir tus pasos cerca de mi habitación

No debí mirar tus ojos con pasión
Ni hablarte de mi afligido corazón…

Ya está tarde, ya el día se ha marchitado
Ya la tarde ha sucumbido a la tormenta cruel
Ya tu ser no es mi ser
Ya tus labios no son de mi evocación

No te quiero, no me quieres
No te busco, no me encuentras

Ya está tarde, ya despídete
Antes que la cruel guadaña siegue tu ser…
(Mayo 08, 2006, 6:46 P.M.)

INSTANTÁNEO

Cuál reflejo superfluo se asomó a tu ventana?
Cuál gallardo fugaz ha penetrado tu ser?

Duda absurda, pensamiento extraño
Acoge a un ser, despide otra ilusión…

Quién es ese que por las mañanas despierta en tu ser?
Dónde está aquél que flaquea al negar tu existencia?

Duda absurda, pensamiento extraño
Beso placentero, soñar lacerante…

Dónde te he visto, cómo has estado?
Ya no me ves, no te recuerda mi corazón…

Instantáneo, tan prematuro
No hay tristeza, no hay dolor
Un renacer cargado de ilusión
Ya ha llegado, instantáneo sin mucho penar…

Quién es ese que se asoma por la rendija
Y medita por un pesar ya acabado?

Interrogante que sólo aquél podrá responder.
(Mayo 08, 2006, 6:35 P.M.)

QUÉ SERÍA?

Si tan sólo pudiera, con una flor
demostrarte mi amor…
Si tan sólo una mirada, una caricia
te enseñaran mi ser

No estaría truncado mi trasegar
Ni andaría lamentando este pesar…

Estaría repleto de bienestar



Si tan sólo pudiera tus labios besar
No estaría esta mañana ansiando tu amor
Ni lamentaría la despedida de ayer…

Si tan sólo supieras que estoy ahí
en la penumbra esperando por ti

No negarías tu impulso
Ni te atreverías a marcharte así…

Si tan sólo pensaras en este insulso
Podrías quizá correr a mí…

No lo sé…

Si tan sólo yo pensara en esta pasión enfermiza

Seguramente destrozaría lo poco que de este sentir queda…

(Mayo 08, 2006, 6:28 P.M.)