sábado, 10 de junio de 2006

VACÍO

Ya la brisa mañanera no me roza
el trinar de los pájaros es insulso
no puedo escucharlo…

Ya no hay luna, no hay estrellas
no hay primavera, no hay calidez,
para mí ya no existen

Todo ha marchitado…

Hay soledad, hay oscuridad,
sólo ha quedado el frío invernal
y una constante sensación de aletargo

No hay sonrisa, no hay alegría,
no hay suspiros de amor

… pero tampoco hay llanto ni desazón

Simplemente aire sombrío,
Soledad masoquista,
Pensamientos funestos

… Y tranquilidad paradójica…

miércoles, 7 de junio de 2006

REGALO

Antes de marcharte,
Un último deseo quisiera que cumplieras
Sólo regálame una sonrisa,
Acompañada con un triste beso, por ínfimo que sea…

Antes de marcharte
Quisiera decirte infinidad de cosas
Pero ya no puedo…
Sólo podré ante Dios orar por ti…

Antes de marcharte, regálame una última mirada
Y después deja que la inquietud se prolongue en soledad
No me mires más, ni siquiera pienses en mí…

Te regalo mi sonrisa, te regalo mi ser
Imprégnate de mis suspiros, de los besos no obsequiados
Y despídete en silencio…

Te regalo este escrito
Quizá olvidando mucho
Quizá olvidando poco
Pero ante todo
Recordando los albores a tu lado…

(Junio 06, 2006, 10:54 P.M.)

YA TE HAS IDO

Ha caído la tarde… ya te has ido
el último trinar de los pájaros he escuchado…
Ya las rosas están marchitas
Y yo estoy enfermo y derrotado…

Ha caído la tarde… ya te has ido
El último amanecer hermoso se ha desvanecido…
Ya la casa está vacía y derruida…
Tú te has marchado…

Aquél parque, aquella plaza
No son iguales ahora…
Sepulcrales y sombrías

… es lo único que hoy queda

Ya te has ido, y te he visto
Vestida de luz, hermosa como siempre
Reina fulgurosa de la noche estrellada

Ya te has ido, me sonríes
te sonrío, y te observo
a lo lejos solitario, pesaroso,
cansado y debilitado…

(Junio 06, 2006, 10:48 P.M.)

viernes, 2 de junio de 2006

AL SON

Al son de un preludio de amor
Te conocí una tarde…
Mientras las rosas florecían,
Mientras el prado embellecía tal escena
Yo de ti me iba enamorando.

Una alegría efímera, un suspiro de pasión
Era lo que tú en mí lograbas despertar.

Una agonía inexplicable, un sentimiento no correspondido
Eran cosas que por ti yo tenía…

Al son de un preludio funesto
Me abandoné a mi suerte
Dejé mecerme por el vaivén de tu ambigüedad
Y por mi misma inseguridad

Más temprano que tarde
Lo fatal a mí llegó…

Tú te fuiste, me dejaste.

Nunca fuiste de mí, nunca lo serás…

Al son de un preludio funesto
Mi corazón ha logrado marchitar…
(Junio 02 de 2006, 1:48 P.M.)